7 de febrero de 2006

"La Guerra del Oro Catamarqueño"




ANDALGALA, UNA CIUDAD DIVIDIDA POR LA ACTIVIDAD MINERA*
La mina Bajo la Alumbrera partió hace años al pueblo entre los que dicen que contamina y que no trajo ningún bienestar.
Andalgalá es la tercera ciudad en importancia de Catamarca. Habitantes del lugar aseguran que el emprendimiento no trajo ningún beneficio, denuncian contaminación y un Estado cómplice. La empresa asegura que todo su accionar está sujeto a la ley. Los pobladores piden un plebiscito para evitar la instalación de otro yacimiento, que será el más importante de América y multiplicaría los problemas.
Agua para no beber. Aire que mejor no respirar. Un pueblo pobre, sobre montañas de oro. Son algunas de las contradicciones de Andalgalá, una localidad catamarqueña de 17 mil habitantes, a 240 kilómetros de la capital provincial, donde conlinda desde hace diez años con la mina de oro y cobre más grande de Argentina y una de las más importantes del mundo.
No es casualidad que desde nubes de polvo llueva tierra en la ciudad. Además, los especialistas advierten que la remoción de las montañas de rocas acelera la producción de sulfuros, que con el aire y el agua producen drenajes y lluvias ácidas, con su contaminación a cuestas.“Los drenajes ácidos representan uno de los principales problemas ambientales de la minería. Producen una contaminación grave”, explican desde Greenpeace.
El titular de la empresa, Julián Rooney, respondió a las acusaciones: “No existe contaminación de ninguna índole. El importante trabajo desplegado y las conclusiones del monitoreo ambiental han servido para que la industria pueda demostrar su apego al cumplimiento de las normas ambientales”, le dijo a Página/12. Los Autoconvocados exigen desde hace años estudios “independientes” de tierra y agua. Un estudio técnico que enarbolan variados sectores fue realizado por el perito minero Héctor Oscar Nieva. Se trata de su estudio de maestría para la Universidad de Nancy (en Francia), que confirmó que el dique de colas tiene filtraciones que contaminan las napas subterráneas de la zona. La empresa reconoció las pérdidas e instaló un sistema de retrobombeo para que la solución que escapa al corral minero vuelva a él. Nieva asegura que la contaminación sigue regándose por el subsuelo catamarqueño.
*POR DARIO ARANDA, PAGINA/12 www.pagina12.com.ar